Lourdes Paredes Cuellas

Opinión -

Como decíamos el mes pasado, señorita María Gil, ¿Para qué da hora una vez al mes a los ciudadanos de su pueblo, para luego pasarle la pelota a la señora Marta Vélez y seguir mintiendo?. ¿No es mejor decir que no hay trabajo y no darle falsas esperanzas a la gente?. Trabajo en el pueblo hay, pero según dices es ilegal darle trabajo a la gente que necesita un mes, un día, quince días, pues también es ilegal mandar ocho familias a la calle con puesto fijo y meter a otras personas a dedo. ¿Es que tienes envidia de la señora Luisa, que dio trabajo a ocho familias con contrato fijo?, mientras tú das seis meses de contrato que no son fijos y así 

volver otra vez a la miseria. Busca dinero como hacia la señora Luisa Ruiz. 

Por otro lado el señor Alejandro Campos, Concejal de Seguridad, debería dar órdenes a la alcaldía para no retirar multas del ayuntamiento, pues así conseguiría dinero para las señalizaciones que necesita el pueblo. El Concejal de Medio Ambiente, señor Pepe Pino, debería esforzarse por mirar las suciedades que dejan los contenedores de los residuos de los perros, que pueden causar infecciones y multar a los propietarios de perros que no recogen esos residuos. Es una vergüenza entrar al pueblo por el Vial Norte y ver la chatarrería dentro del casco urbano sin ni siquiera estar cercada, debería ser trasladada a un polígono industrial y tener todos los permisos pertinentes. Y el Concejal de Deportes, el señor Francisco Turiel, tiene el campo de futbol del Antolín para cuadra de caballos pues pasando un día de casualidad por allí, cuál fue mi sorpresa al encontrarme un caballo pastando en el campo de futbol. ¿Es que no tienen gasolina para la desbrozadora?. ¿Y no es mejor darle a dicho campo de futbol un uso público, para no permitir que se deteriore?. En este pueblo existe la dejadez y no el mantenimiento de edificios públicos.

En Peñarroya-Pueblonuevo, si la alcaldesa de verdad quiere sacar al pueblo de la miseria, que busque dinero o subvenciones para rehabilitar el  viejo hospital y dar trabajo a las empresas del pueblo. En el Hotel Rural, por ejemplo, ya han robado grifería, fontanería y electricidad precisamente por la dejadez de edificios públicos, como antes mencionaba.