Portada
Actualidad
Opinión
Política
Sociedad
Cultura
Entrevistas
Deportes
Humor
Psicología
Ocio
Curiosidades

Envíanos tu artículo

 
 
Pueblos
Servicios
Hemeroteca
Fotografías
Enlaces Interés
 
 
 
¿Quiénes somos?
Publicidad
Contacto
Localización
Suscripción
 
 
Diseño Web
 
 
 
 
 
Cultura
Hoy es Lunes, 01 de Abril de 2024
DESDE EL JERGÓN
Publicado el 17 de Febrero de 2023, Viernes

J.J. Caballero

Cultura -

Si no saben bailar, búsquense un espacio y un horario libre y empiecen a practicar; si no saben hablar en privado, ni lo intenten en público; si no saben convencer a una sola persona, olvídense de intentarlo con muchas; si deciden regresar para siempre, no les será posible volver a irse. Así podríamos seguir hasta el infinito y parte del más allá, más aquí que ahora y más nunca que en otro lugar. Son las contradicciones cotidianas las que alientan mi devenir, a estas alturas no deberían extrañarse. Es solo música sin palabras, renglones sin versos y bocas sin lengua lo que guían estas líneas, demasiadas veces escritas al libre albedrío de la libertad sin brío. No hay parangón que valga, no existe razón que salga. Los colores de hoy lucen rozagantes, llenos de lujuria implícita y aires de una grandeza fingida. Son las sombras de mañana y los restos de un ayer glorioso en su enorme miseria. De aquellos polvos nacieron estos lodos, de esos límites surgieron aquellos nacimientos. Es en el resurgir donde encontraremos el reposo y la calma perseguidas durante tanto tiempo. Sin pensar en la sandunga que amenaza con provocarnos, siempre hay tiempo para relamerse en la última frustración.

                Abran las compuertas y sabrán por dónde les viene el viento; separen los alféizares y verán cuándo les sopla el cierzo; descubran los techos y oirán cómo les ladran los perros. Hemos pasado de ser buenos acompañantes a estar mal acompañados. Una cuestión de malas elecciones, dirán algunos; solo un asunto de heridas y corazones, afirmarán otras. El caso más flagrante es el de aquel que no logró levantarse tras el último golpe asestado y acabó venciendo a todos sus enemigos después de muerto. Todos creeríamos que era imposible de no ser porque ignorábamos que en verdad sí que era posible. Como la alegría que nos inunda después de dar rienda suelta a nuestros deseos y ser correspondidos en el empeño, cuando la soledad se convierte en necesidad no hay nada que nos haga dar marcha atrás. Habrá que llamar a alguien para justipreciar nuestras almas y reconquistar el peso perdido en mil sueños de alcoba, cuando nos veíamos desde arriba pero elevados o nos escuchábamos desde abajo pero no pisoteados. También sería propicio localizar las partes más túmidas, donde se agolpan las injurias y los menosprecios y nada es más oscuro que la propia razón de ser. O la sinrazón de saber. Y a la sazón, el no poder. Será peor el reconocer que se sabe y no se termina de poder, o el reconcomer lo que se puede y no acaba de saberse. La ignorancia otra vez, la diosa de todas las cosas posibles e imposibles, el mayor mal de todos los tiempos. La ataraxia, una enorme losa tan fácil de levantar como sencillo es darle el mando a cualquiera que pueda hacerlo.

                Hace tanto frío que es difícil discernir cualquier contacto humano del calor de algún animal. Al final, es lo que somos o lo que seremos cuando ya el hielo que nos consuma no sea más que el del tiempo inmarchitable. Tenemos tantos límites que no salimos de nosotros mismos por miedo a descubrirlos. El confort era esto, y cada vez que lo pienso llego a la misma conclusión: Si pisamos territorio común, ¿por qué no llegamos a ningún acuerdo? Debe ser por la dichosa patulea que nos solivianta y nos impide pensar con claridad, o al aljófar de los primeros minutos del día, que perla con imágenes amables el recuerdo permanente de las obligaciones por cumplir. Al día siguiente, la sangre volverá a encajar la letra y los modos se ajustarán a las formas. La luna y el río. El cerebro y la piel. La pared y la puerta. La sombra y la luz. El no y el quizá. El para cuándo y el por qué. No queramos buscar más problemas, ellos ya vendrán solos, como lo han hecho toda la vida. Hubo en tiempo en que veía a seres ojienjutos dispuestos a forzar una emoción no consentida, y a cultiparlistas divagar sobre la necesidad de ser comprendidos. Solo por burlarme de todos ellos, describiría aun a riesgo de ser tachado de algo parecido lo jarifos que eran entonces, cuando no había nadie que los escuchase. ¡Qué bonita es la indolencia!

                Hasta que el sol entre de nuevo en el salón sin pasar por los demás cuartos y hasta que no se le vea el final al cuento, que es básicamente lo mismo, seguiré dando vueltas sobre mí mismo y enseñando a pronunciar palabras que serán difíciles de recordar, sobre todo porque rara vez serán pronunciadas. Mientras tanto, nos comeremos el postre antes del primer plato. Porque nosotros lo valemos.

 

 

 

Disco del mes: The Smile – A light for attracting attention

               

Noticia redactada por :

J.J. Caballero

Cultura : Últimas noticias

El Consejo de Gobierno acuerda la actualización del precio del comedor del primer ciclo de Infantil

DESDE EL JERGÓN

TORRIJAS

  • Comentarios de los lectores
  • No hay comentarios para esta noticia... Se el primero en comentarla!
Comenta esta noticia


Nota: los comentarios serán publicados tras ser revisados, por lo que pueden no aparecer inmediatamente tras ser enviados.
 
Portada - Contactar - Pueblos - Inscripción - Escribe tu artículo - Hemeroteca
Guadiato Información - www.publicacionesdelguadiato.com
Diseño web : azuanet