Lourdes Paredes Cuellas

Peñarroya-Pueblonuevo - Actualidad -

La Guardia Civil ha detenido en Peñarroya-Pueblonuevo a un hombre de 38 años, identificado como C. F. V. y de nacionalidad rumana, que supuestamente amenazó de muerte en días distintos a tres personas en el municipio y también en Fuente Obejuna, por lo que se le imputa un supuesto delito de amenazas de muerte y otro de tenencia ilícita de armas.

El Instituto Armado informó de que los hechos se produjeron los pasados 8 y 23 de octubre en Peñarroya-Pueblonuevo y el 3 de noviembre en Fuente Obejuna. Los tres denunciantes coincidían en señalar que habían sido amenazados de muerte, incluso con un arma de fuego en dos de los casos, todo ello "sin motivo aparente alguno". Ante ello, y dada la gravedad de los hechos denunciados y la alarma social que se estaba creando, la Jefatura de la Comandancia de la Guardia Civil de Córdoba encargó la investigación al Equipo de Policía Judicial de Peñarroya. Este grupo de trabajo inició una serie de gestiones para esclarecer los delitos y la identificación, localización y detención del supuesto autor de las amenazas.

En un primer momento y con los datos aportados por los denunciantes, la Guardia Civil consideró que el autor de las amenazas podría ser un ciudadano de nacionalidad italiana, que utilizaba en sus desplazamientos un turismo marca Volkswagen Passat de color negro. Ante ello, los agentes centraron sus sospechas sobre personas de esta nacionalidad que utilizasen este tipo de coches. Sin embargo, el avance de las gestiones permitió a la Guardia Civil saber que una persona de nacionalidad rumana, concretamente, C. F. V., que respondía a las características físicas del sospechoso, era titular de un turismo de similares características al utilizado por el supuesto autor.

Ante ello, se estableció un dispositivo para su localización y detención, que sirvió para localizar el pasado 8 de noviembre al vehículo en la avenida de Andalucía de Peñarroya, ocupado por el sospechoso, C. F. V. En ese mismo momento, la Guardia Civil identificó al ahora arrestado y lo trasladó al puesto de Peñarroya. A pesar de su identificación, la Guardia Civil no tenía en ese momento indicios y pruebas suficientes de su implicación en los delitos, por lo que quedó en libertad.

El Instituto Armado continuó con sus investigaciones y finalmente pudo comprobar que sobre C. F. V. recaía una orden de prohibición de salida del territorio nacional por un delito de falsificación de moneda y otro de asociación ilícita. El avance de la investigación y los datos obtenidos a través de los denunciantes permitió a los agentes obtener los indicios y pruebas suficientes de la implicación de C. F. V. en los hechos, por lo que fue detenido.

En su declaración, el arrestado confesó su autoría en los ilícitos y accedió voluntariamente a la entrada y registro de la vivienda donde residía. En ella, la Guardia Civil encontró el arma utilizada para la comisión de los ilícitos, que era una pistola de fogueo, con apariencia real, que fue intervenida.