Lourdes Paredes Cuellas

Belmez - Sociedad -

    En días pasados ha tenido lugar la tradicional fiesta de las candelas por toda la localidad.

   Los Tomillos es probablemente la fiesta más romántica de Belmez. Sábado, lunes, domingo, día o noche el pueblo vuelve a disfrutar reivindicándose en nuestra cultura, nuestra tradición y nuestro folclore. La fiesta de los sentidos, la fiesta más familiar y más entrañable.

   El puerto y los mestos por la mañana para recoger la aromática, la tarde para el transporte y la preparación de la candela, la comida y el pitarra, y la noche para arder entre vecinos y la copiosidad del chorizo y la morcilla de la matanza entre esas ascuas con un color, un calor e incluso un olor especial.

   Una de las candelas con más solera del pueblo, la candela donde siempre "hay más gente", es la de la Calle Nava, un joven técnico de la Consejería de Cultura que trabaja en el Instituto Andaluz de Patrimonio que estaba en el pueblo porque se encuentra elaborando un atlas de las fiestas populares y tradiciones del norte de la provincia, me hablaba de la riqueza de nuestro folclore y de lo bonita que le parecía la fiesta. Cámara en mano tomaba datos gráficos de la noche. Me entusiasmó, me alegró mucho ver que nuestra tradición sigue my viva y que es apreciada fuera de las "fronteras" del Guadiato y que las administraciones se preocupan de ello. Nadie tiene que decirnos lo maravillosa que es esta fiesta, pero nos gusta ¿verdad?

   Cuídemosla entre todos. Sábado, lunes, fin de semana... lo importante es que sigamos viviéndola, sintiéndola y apreciándola en su sencillez y grandeza. Que los niños la conozcan pronto y que participen en ella como han hecho este año en el colegio, que los mayores sigan cantando y bailando y que los belmezanos ausentes sigan reuniéndose en Madrid o donde estén para bailar alrededor de uan candela y comerse unas migas.