Fuente Obejuna - Actualidad -

Las primeras en instalarla fueron las vecinas de la calle Sevilla. Lo hicieron como es habitual desde hace 4 años, en una cochera y allí se reunieron todas las tardes durante nueve días en su Cruz de estilo interior, para rezar el Rosario y compartir después una merienda a base de café y dulces que ellas mismas prepararon.
Además, este año se han animado por vez primera los vecinos de las calles Rosario, Nueva y Maestra. Aparte de la Cruz, adornaron con mantones y colchas los balcones de la calle Nueva, que estaba desconocida, con bellas macetas en las puertas de las casas. También contó la Cruz con una imagen de la patrona mellariense, la Virgen de Gracia. Se trató de una Cruz muy familiar ya que el objetivo de estos vecinos era el de estar todos unidos, de esta forma bailaron y disfrutaron, especialmente los mayores, aunque también demostraron su hospitalidad invitando a los que venían a verla, con los que compartieron lechón y dulces como flores y pestiños, que realizaron lasos propias vecinas.
En los bares también hubo cruces, como en el Círculo, en el mesón El Comendador o en el de los karts, que es la que se muestra en la foto. Allí, la fiesta se celebró con una parrillada a base de langostinos, sardinas asadas y salmorejo.
Los más pequeños paseaban sus pequeñas cruces por las calles, pidiendo donativos a todos aquellos que las admiraban.
Muy original ha sido sin duda, la realizada por la Asociación de Vecinos Mellariense, Cruz de Mayo. Estaba realizada a base de bellotas e instalada en la calle Cervantes. Estos vecinos llevan cuatro años celebrando esta fiesta, siendo parte muy importante en la recuperación de esta tradición, que se encontraba prácticamente desaparecida en la localidad. Un programa a base de concurso de karaoke, del juego de la tanga, juegos populares - carrera de sacos, juego del huevo - para todos los públicos, talleres de maquillaje, globoflexia y baile fueron los actos preparados, además de las dos paellas que ofrecieron gratis a todos los asistentes.