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El Consejo Territorial del Grupo de Desarrollo Rural - GDR- Valle del Alto Guadiato, ha aprobado la concesión de subvenciones por valor de 195.014,99 euros, a trece proyectos. Algunas de las iniciativas beneficiadas son la modernización de explotaciones agrícolas, de una panadería, la adquisición de una báscula municipal destinada a vehículos, de maquinaria para cosechar, de otras para una empresa de servicios agrarios o la restauración de las campanas de varias parroquias. La inversión generada en la comarca asciende a 635.272,88 euros.

Por otro lado, la presidenta del GDR, Isabel Cabezas ha vuelto a “reiterar y denunciar la situación en la que se encuentra la clínica veterinaria de Bárbara, en Peñarroya-Pueblonuevo”, añadiendo que solicitará “una vez más, que se envíe una carta, otra, a la directora general, porque no entiendo que un empresario lleve prácticamente dos años, con un aval retenido en la Junta, que no había tocado el expediente hasta hace unos meses”. Cabezas dijo entender “el desánimo de esta empresaria”, manifestando que “no podemos ofrecer esa imagen ante promotores que se deciden, además de a mantener sus empresas, a ampliarlas, generando riqueza y empleo”. La presidenta ha afirmado que “deseo que seamos una entidad que funcione ágilmente, dando respuestas rápidas, contundentes y que ayudemos a la creación y el mantenimiento de puestos de trabajo”, insistiendo en “la urgencia con la que pedimos que se agilice el expediente, porque entendemos que no hay ninguna explicación que pueda convencer a esta empresaria, ni a mí, como presidenta, ni paciencia para aguantar este retraso de la Junta, que está con  todavía con el expediente encima de la mesa”.

Isabel Cabezas quiso dejar claro que “los técnicos del GDR de aquí están haciendo esfuerzos para que todo salga lo más rápido posible, pero pedimos que cuando los expedientes lleguen a la Dirección General, que hagan su trabajo porque esta emprendedora ha comenzado con dos puestos de trabajo y siempre ha hablado de seguir ampliando, pero es que 30.000 euros para una empresa pequeña, es mucho dinero y nos ha dicho que, si no fuera por la ayuda de sus padres, posiblemente se vería obligada a cerrar y eso sería un fracaso para la Junta, que alguien tuviera que cerrar por un retraso en la resolución de un expediente”.