Programa impulsado por las Consejerías de Salud y de Inclusión Social
- La baja tasa de ocupación del 40,31% (27 de 64 plazas ocupadas) a 30 de junio de 2025 es profundamente preocupante a juicio de SATSE motivo por el que reclama una estrategia para aumentar las derivaciones y potenciar el papel de la enfermería
- El programa, cuyo pilotaje se puso en marcha en febrero de 2024, tiene como objetivo la coordinación de los sistemas social y sanitario para atender a las personas dependientes, o potencialmente dependientes, y con patologías cronificable
El Sindicato de Enfermería, SATSE, en Andalucía ha denunciado la preocupante baja ocupación de las plazas residenciales temporales destinadas a personas con necesidades de cuidados cualificados en Andalucía. Se trata de un proyecto piloto financiado con fondos europeos del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia que, a pesar de su importancia, apenas alcanza una ocupación del 40,31 por ciento.
SATSE considera esta situación una grave subutilización de un recurso vital y reclama a la Consejería de Salud y Consumo y a la Consejería de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad que adopten medidas urgentes para revertirla.
Y es que, según los datos presentados en la última reunión de seguimiento del proyecto, a fecha 30 de junio de 2025 solo estaban ocupadas 27 de las 64 plazas concertadas, con una utilización desigual por provincias.
En concreto, Sevilla encabeza la lista con 20 plazas concertadas y 12 ocupadas, seguida de Jaén con 10 plazas y 5 ocupadas, y Almería con 10 plazas y 4 ocupadas. Huelva presenta 3 plazas ocupadas de las 10 disponibles, mientras que Córdoba y Granada, con 4 y 10 plazas respectivamente, registran 2 y 1 ocupación. En Cádiz y Málaga no existe este recurso residencial, teniendo que derivarse a residencias de las otras provincias.
Para SATSE resulta inaceptable que un recurso tan necesario, diseñado para garantizar la continuidad de cuidados a pacientes con patologías traumatológicas y necesidades sanitarias y sociales complejas tras el alta hospitalaria, esté siendo tan poco utilizado.
Esta situación no solo representa un despilfarro de fondos públicos sino que, lo que es aún más grave, impide que muchas personas accedan a la atención que necesitan para recuperarse adecuadamente y evitar reingresos hospitalarios innecesarios.
Falta de difusión
El sindicato advierte que esta baja ocupación pone en evidencia importantes fallos en la gestión y difusión del proyecto, todo ello a pesar de que se había previsto una estrategia de difusión entre los profesionales implicados, que la realidad demuestra que esta ha sido insuficiente o ineficaz.
En esta línea, la organización sindical señala que trabajadores sociales de hospital y enfermeras gestoras de casos, figuras clave en la derivación de pacientes, o bien desconocen la existencia del recurso o no han recibido la formación necesaria para identificar a los pacientes adecuados y realizar los trámites correspondientes.
También se han detectado problemas en el proceso de derivación que, aunque se planteó como ágil con un plazo máximo de cinco días, sigue siendo lento y con barreras burocráticas que dificultan el acceso. La herramienta online habilitada para el seguimiento de casos apenas ha registrado 20 pacientes, lo que apunta a fallos en su diseño, accesibilidad o promoción entre los profesionales.
Además, SATSE muestra su preocupación por los criterios de exclusión establecidos, que dejan fuera a personas con patologías psiquiátricas o deterioro cognitivo con alteraciones de conducta graves, a pesar de que podrían beneficiarse de estos cuidados temporales.
Resultados
El sindicato lamenta también la falta de datos sobre los resultados del proyecto pues no se dispone de información sobre la evolución de los pacientes, la efectividad de las estancias ni el impacto en la reducción de reingresos hospitalarios.
Sin estos indicadores no es posible evaluar el verdadero alcance de la iniciativa, motivo por el que el Sindicato de Enfermería insiste en que los profesionales de enfermería, pilares fundamentales de los cuidados cualificados, deben estar plenamente integrados en todas las fases del proyecto desde la planificación hasta la evaluación.
Por todo ello, el sindicato insta a la Junta de Andalucía a actuar de inmediato para mejorar la difusión y formación de los profesionales implicados, revisar y simplificar los procedimientos de derivación, optimizar el uso de la herramienta online, reevaluar los criterios de exclusión y establecer indicadores claros que permitan medir el impacto real del proyecto.
SATSE concluye que no se puede permitir que una iniciativa con tanto potencial para mejorar la vida de las personas mayores y aliviar la presión sobre los hospitales quede en una promesa incumplida motivo por el que el sindicato termina reiterando su disposición a colaborar plenamente para que este recurso funcione a pleno rendimiento y cumpla con su propósito esencial.