EL DIVÁN 2.0
Quizá, no lo haya entendido todavía que tu amor va a estar siempre ahí, de manera física como en estos momentos, o de manera espiritual.
Allá donde llegan los gestos, las palabras, el cariño permanente, tus besos sagrados y llenos de tanta pasión.
Este artículo de El Diván 2.0 va dirigido hacia todas esas madres, que han sacrificado sus vidas por sus hijos, y que hoy domingo, celebran su día.
Aquellas que después han sido abuelas y bisabuelas y lo han dado todo sin pedir nada a cambio, sólo querían que les ofrecieran amor y cariño.
No sólo una madre está para quererte, está para darte la vida sí hiciese falta.
Una madre es una madre, ní se le falta el respeto ni se toca.
Una madre es una manta, que te cobija y te arropa en las noches frías.
Una madre es un sendero, dónde te allana el camino para llegar a sus brazos.
Las madres nos han dado lo más bello de este mundo, que es la vida. Y eso, es más importante que todas las cosas.
A las madres del mundo, les transfiero en este artículo que sigan así: dando mucho amor y mucha cariño. Como una madre hace desinteresadamente.
Y ante una madre, hay que rendirse y besarle los pies.
¡FELIZ DÍA DE LAS MADRES!
P.d.: «Muchas maravillas hay en el universo; pero la obra maestra de la creación es el corazón materno» (ERNEST BELSOT).