Más noticias

― Publicidad ―

INSIDE PC
InicioActualidadARANCELES Y ALGO MÁS

ARANCELES Y ALGO MÁS

Estamos tan imbuidos de la idea de que una guerra consiste en matarse unos a otros con armas más o menos convencionales que ahora  este concepto puede quedarse anticuado en esta era del imperio trumpista. Hasta ahora si alguien hablaba de guerra imaginábamos soldados, trincheras, bombas, drones, sangre, destrucción…. lo típico. Tendremos que cambiar el chip porque están cambiando los conceptos a una velocidad que podemos llegar tarde a entender que verdaderamente estamos en guerra.

Estos días y los que siguen se va a hacer muy común escuchar por doquier  la guerra de los aranceles sin que lo entendamos del todo bien porque guerra va a haber pero no nos van a pasar por encima los misiles lanzados desde un bando al otro y, por tanto, podemos normalizar (que se dice) el tema de los aranceles que, para decirlo pronto y claro, son las bombas del presente hasta el punto de que ni seamos conscientes  de que estamos en guerra.

Víctimas va a haber, por supuesto, porque no imaginamos una guerra sin víctimas; lo que puede suceder es que no hagan falta los hospitales porque morir por efectos de la precarización de la vida o depauperados no implica mucho gasto de hospitalización y cuidados, basta con una buena subida del IPC y la carestía de vida para que una buena parte de nuestra gente adelgace indefinidamente.

Que no nos engañen, por favor, una guerra es una guerra. Podemos ponerle el adjetivo que queramos: fría,  electrónica, cultural, de las galaxias, contra el terrorismo, guerra sucia, o como ahora, guerra de aranceles. Lo sustantivo sigue siendo guerra, solo cambian los adjetivos. Guerra. El mundo vive en un estado de guerra permanente.

Ahora toca guerra de aranceles y, como tal guerra viene adobada con ardor guerrero en forma de titulares, imágenes de reuniones y videos de Tik Tok hasta el punto de que nos parecen meras alegorías, un uso figurado del lenguaje bélico, una forma de hablar, pero no una guerra de verdad.

Pero las guerras comerciales también son guerras. También hay bandos, aliados, enemigos, frentes. En esta de ahora,  incluso hay ultraderechistas que  se refocilan con   que el amigo americano nos amenace con aranceles. Habrá  vencedores y vencidos y,  por supuesto, víctimas y descalabros, aunque no sean visibles como los causados por los proyectiles. Y (no creo que nadie lo dude) la acabaremos pagando los de siempre, no hace falta señalar.

Así que la guerra de aranceles desencadenada por el amigo americano que quiere ser emperador a base de doblegarnos es la misma guerra ya conocida pero por otros medios. Y será comercial solo en la medida en que le vaya bien a él. En el momento en que le falle la munición o se vuelva contra él o que nosotros- el resto del mundo- le pierda el miedo, pasaremos a la guerra-guerra de siempre con sus marines y todo. Así es que atentos.

Ah! Y por cierto, las guerras no admiten neutrales, la equidistancia, ponerse de perfil, yo no sabía nada…obligan a todos a adoptar posiciones estratégicas en una u otra trinchera. A este respecto, bueno es recordar que  a nosotros los andaluces, españoles, europeos nos alinean con quienes defienden el libre comercio, la globalización neoliberal, las fronteras para personas pero no para capitales y mercancías, la deslocalización industrial en busca de mano de obra barata, todo  bajo los auspicios de la democracia y los derechos humanos y con un cielo lleno  de estrellas.

¿O no?

DEJA UN COMENTARIO

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí
Captcha verification failed!
La puntuación de usuario de captcha falló. ¡por favor contáctenos!

― Publicidad ―

spot_img

Peñarroya-Pueblonuevo