EL DIVÁN 1.0
Aludiendo a la canción del cantautor hispano-francés Manu Chao, «Me llaman Calle», quiero hacer honor a todas aquellas «Princesas» que tal cuál Fernando León de Araona retracta en cuyo film a unos de los oficios más antiguos del mundo.
Viendo ahora todo lo que está pasando con el «Caso Koldo», y viendo al ex-ministro de transportes José Luis Ábalos, y a las tales señoritas de alterne que le da cabida tanto para trabajar en la cama como para el estado, sólo con saber leer y escribir, como también entender el francés, como juegos amorosos.
La trama del «Caso Koldo» tiene mandanga, por cierto en nuestro municipio se silencia todo lo que está saliendo últimamente, y nos salpica a nosotros también, pero quizá se hace oídos sordos a la compra de una refinería, como a la compra de un yate en Sanxexo en Galicia por parte del ex-chofer del presidente, bien conocido por todos nosotros.
Y ante ese silencio sepulcral, corren las chicas entre bambalinas, rula el alcohol y las sustancias psicotropicas a costa de los impuestos de los que doblan el lomo. Asquerosa política, como deleznable malas artes para hacerse millonarios con la pandemia y de una tragedia de cientos de miles de muertos en España para mercadear con las mascarillas.
Mientras tanto, obviamente la carne es débil, y que dos tetas pueden más que dos carretas.
Pero, yo a estos, lo podría a cavilar, y a darle un escarmiento, háblase se un encancerlamiento ejemplar, como de un escarnio público y notorio para hacerse notar el linchamiento y el malestar de los españoles honrados y que viven al margen de la política corrupta y felona de nuestros políticos de baja cuna, y de baja cama.
Posdata: «Nunca se debe gatear cuando se tiene el impulso de volar» (HELEN KELLER)