EL DIVÁN 1.0
Sigo escribiendo cada día una nueva página con nuevas ilusiones, nuevas sensaciones, si no encontrase un motivo cada día no sé qué pinto yo aquí en este mundo. Un mundo donde hay en pleno siglo veintiuno un señor sembrando el terror en un país que quiere progresar y estar a la misma altura que las demás naciones de Europa y desde el este donde se sitúa Ucrania un país masacrado y desmantelado por un genocida que no hace más que mirar para sí mismo, que a cambio mira un poquito por un país inocente naife, pero eso queda para las superpotencias mundiales que tienen que intervenir y pararle los pies a un psicópata ególatra que no hace más que jugar y sesgar las vidas de ciento de miles de civiles ya muertos y lo que te rondaré morena. En las noches de insomnio no hago más que pensar en las vidas de los otros, en la vida de los equilibristas, en esas vidas que hacen malabares para llegar a un punto de equilibrio entre el bienestar y la comodidad, no buscan lujos, sólo una vida que conjugan dos artículos imprescindibles de nuestra querida Constitución: Un trabajo digno y un hogar donde cubran todas nuestras necesidades. España es muy rica, no hablo económicamente, hablo lo culturalmente lo rica qué es, nosotros mismos nos estamos peleando políticamente, sin llegar a punto de encuentros y de inflexión, llegando a grandes acuerdos, dónde el quiénes salgan siempre ganando sean los españoles. Pero, eso es algo muy complejo, tan complejo como la salud mental, donde cada vez se dan más casos de suicidios, y lo digo como enfermo mental donde llevó sufriendo desde muy pequeño, pero lo llevo bien, con una actitud positiva, pero allanándome en el suicidio, siempre hay un motivo principal donde conjuga el desenlace final donde estos seres humanos débiles, deciden decirnos adiós para siempre, donde la vida de las personas no valen nada, pero merece vivir la vida tal y como viene y donde lanzo dos mensajes nítidos y precisos.
“Vivir hacía el respeto Mutuo” y “Vivir cómo nos dé la gana”. En estos dos mensajes dejo claro bien mis intenciones, vivir con respeto hacia los demás y vivir y hacer lo que me venga en ganar sin herir sensibilidades. Los logros conseguidos por el lado que me toca, hay un gran trabajo detrás, de picar piedra, donde inmerso en un ciclo formativo, en una asociación de discapacitados de movilidad reducida, que ejerzo, como secretario, y colaborando siempre que puedo con un centro social de usuarios con enfermedades mentales, así como estoy haciendo en estos momentos, colaborando con este periódico local, Guadiato Información y Azuaga Campiña Sur, desde hace dos años. Es un lujo tener la suerte de encontrarme con tanta buena gente y de personas en nuestra Sanidad Pública y en la Sociedad, que merecen la pena conocer. Todo esto es posible junto a mi familia y amigos sin ellos esto no sería posible, le estoy una y mil veces agradecido a mi enfermedad mental, porque me ha hecho mejor persona, me ha hecho más fuerte y más responsable, más empático, más humano y más amante por las cosas pequeñas. No hay que rendirse, no hay que bajar los brazos, por ti estoy escribiendo todo esto, contigo empezó todo esto hace más de veinte años, por ti aún estoy descolocado, por ti hoy busco mi sitio y le doy sentido de que tú estarás orgullosa de mí, por ti aún hoy te estimo y busco cobijo entre mis lágrimas, desde donde estés, va por ti, todos estos artículos, escritos hasta el momento, de “El Diván”, y no he dejado de creer que el destino algún día nos podrá volver a reunir.
Tu tiempo es mi tiempo y el tiempo perdido, las noches en qué te he soñado y has crecido desde que te vi con tus once años en el Hospital Reina Sofía me hace pensar que estás igual que en las muchas veces en la que te he soñado y me haces permanecer convencido que mis anhelos algún día se harán en promesas cumplidas. La fortaleza del ser humano está en sus sinsabores, en su pérdidas, y mi legado personal quedará reflejado en una idea que es en llegar todo lo que he escrito y sé a todas las sociedades, sin desprenderme de nadie, porque todos los seres humanos aportamos y somos precisos y si me lo permitís, a este mundo no se viene a sufrir, se viene a disfrutar y en los simples detalles está la grandeza de todos nosotros y mi respiración, es tu respiración, y si mi corazón late, es porque el tuyo me hace que mi ritmo cardiaco sea inalcanzable, para poder llegar a cumplir todos mis objetos, y sin que tú lo sepas, me has hecho sentir cada día tan especial y hacer de que esta leña arda y pronunciar sí a la vida y llegar a lo más inhóspitos de los lugares que he logrado llegar, es gracias a tu ayuda. Desde lo más hondo de mi corazón no quiero dejarme a nadie atrás, poner fin a lo homofobia y la xenofobia, no soy quién para rechazar a nadie ni por su raza ni por su condición sexual, soy una persona que no tiene enemigos y si a alguien le he hecho algo o se ha visto incomodo conmigo le pido disculpas, no era mi intención, tengo la conciencia tranquila y no tengo deudas emocionales con nadie, simplemente decir que estoy reconstruyendo mi vida lo más honesta y sincera que puedo construir, desde una perspectiva donde no siempre me salen las cosas como yo quiero, porque nadie es perfecto, pero lo que sí quiero decir que tengo una libertad para pensar y elegir lo que quiero y no quiero en esta vida, dejar de hacer, dejar de creer en ti. La primera piedra la pongo hoy, y todo esto es por ti, por una ilusión, por un proyecto en la que llevo mucho tiempo detrás de ella. Ahora te paso el testigo a ti y a evaluar todos estos artículos y vivencias, donde he querido plasmar toda mi vida, porque mi vida es tu vida, como tuya qué es, me has dado la libertad de contarla tal y cómo es.
“Los sueños primerizos, son reales porque tú lo hacen que sean posibles”. Desde dónde estés, Estíbaliz, tú has sido mi musa para que esto salga adelante. ¡Te Estimo!
Posdata: – “Deberíamos reencontrarnos para marchar juntos a nuevos éxitos” (GIUSEPPE GARIBALDI).